La Parroquia Patrocinio de San José a parte de estar custodiada por los santos y el “Señor”, a partir de los últimos días tuvo que sumar seguridad privada más la instalación de un circuito cerrado de televisión.
 
“La iglesia no se queda afuera de lo que ocurre en la sociedad, es parte de ese mismo núcleo, y la realidad es que desde hace algunos años venimos sufriendo robos o episodios de violencia, alguno bastante grave, por lo que decidí tomar algunas medidas, como colocar cámaras y contratar seguridad privada, que no permanece las 24 horas, pero se desempeñan cuando la presencia de gente aumenta en la iglesia”, explicó el padre Julio Torres, a cargo de la iglesia Patrocinio de San José, ubicada en Ayacucho 1064, en el barrio porteño de Recoleta.
 
“Hace unos tres años que venimos padeciendo problemas. En un caso fue bastante grave y preocupante, porque entraron con armas y coparon la secretaría. No había mucho dinero, pero se llevaron todo lo que pudieron, maltratando a la gente que en ese momento estaba en el lugar. Después hubo otros hechos y muchos hurtos. El año pasado fueron dos los robos. Ahí se me pararon las antenas, y decidí contratar seguridad, y también sumar un servicio de cámaras de circuito cerrado”.
 
Desde hace varias semanas un uniformado permanece en el ingreso e interior de la parroquia. La situación es tan preocupante que se ha reducido el horario en que permanece abierta la Iglesia, ya que muchos de los fieles no se animan a salir de noche.
 
Torres explico que el costo de los servicios de seguridad es solventado en su totalidad por los fieles que sufren el trastorno cotidiano de la inseguridad.