Un nuevo perfume intenta imponerse en el mundo de la moda, lo curiosa es que su fragancia es de sudor.
Pero no cualquier sudor, es bueno para este perfume, tiene que ser sudor de los sopladores de vidrio de Suecia.
La extraña y olorosa ideo es de Daniel Peltz, profesor adocilado de Cine/Animación y Video en la Rhode Island School of Design.
Peltz que paso algunos veranos en Rejmyre, Sweden, se le ocurrió la idea al recoger el sudor de los sopladores de vidrio y convertirlo en perfume, después de darse cuenta de que cada pieza de vidrio producida en la fabrica de vidrio local contenía un poco de sudor de su creador.
“El trabajo del soplador de vidrio es algo que los turistas aprecian mucho cuando vienen por aquí”, además agrega Peltz, “para mi no hay gran diferencia en vender el sudor del soplador de vidrio y el vidrio acabado”.
Perltz, ha puesto también un poco de su propio sudor. “El sudor que me han refinado en una receta secreta”, aclara.
El sudor puede sonar como un producto “desagradable” para un perfume, pero los fabricantes de perfumes han probado con un centenar de productos insólitos, como el ámbar gris, una forma de vomito de ballena, entre otros.
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